jueves, 3 de enero de 2019

JERRY DA SILVA MATZ

BUSCADORES DE INSIGNIAS PERDIDAS


Jerry Da Silva Matz
Con el uniforme de la ACS (Asociación Catalana de Scouts)
Imagen: Archivo de Jerry Da Silva

PRESENTACION
Jerry no necesita presentación. Muy conocido por la gran mayoría de los coleccionistas scouts españoles y de todo el mundo. Un veterano muy curtido en estas lides, y el más antiguo coleccionista scout español activo... 42 años en esto, toda una vida. Es el Decano del coleccionismo scout español.
Esta actividad para él ya no tiene secretos, todo a base de muchos años de experiencia cargados de ilusión, pero sobre todo de mucha paciencia… La ilusión le mantiene, sabe que cuando menos te lo esperas surgen gratas sorpresas, además se le denota una gran dosis de entusiasmo, sin duda ha recibido muchas satisfacciones de esta noble y escultista afición.
De profesión licenciado en Geografía, ha trabajado en curtidos y logística; actualmente es técnico de control de acabados en una empresa textil (artículos de lujo). Esta es su vida scout y coleccionista.


SU HISTORIAL EN EL ESCULTISMO
Mi vida scout se desarrolló en Barcelona. Comencé en 1971 como lobato en el grupo Antoni Gaudí de la DDE, lo dejé porque me aburría un montón. De scouts tenían el nombre, pero de actividades y mística CERO.
En 1975 es mi etapa scout en el grupo 228 Roger de Llúria (ANEDE/ASDE), la otra cara de la moneda. Era un grupo muy tradicional, con lobatos, scouts y rovers. No teníamos unidad esculta hasta mi quinta, que fue un desastre. Me marché del grupo y acabé mi etapa esculta en el grupo 230 Can Baró (ANEDE/ASDE). Luego se intentó hacer un clan rover, no cuajó, nueva movida y me fui a hacer servicio con otro hermano scout al grupo 229 Rudyard Kipling (ANEDE/ASDE) que compartía locales con el Hogar Zaragoza (escuela de montaña) de la OJE; mi compañero en la tropa, yo en manada y así casi tres años hasta que el grupo perdió el local y nos fuimos a un Centro Moral (centro católico) del barrio de Gracia donde acabó de zozobrar hasta cerrar. Para entonces había iniciado mi etapa rover que tuve que seguir casi en solitario gracias a la ayuda del grupo 31 Sta. María del Mar (ANEDE/ASDE), que luego pasaron a denominarse Edelweiss y hoy Mas Guinardó. Un periodo donde la asamblea en Cataluña decidió que Juan Charlez, JG del 31, fuese también Comisario de Zona y con él estuve como rover en servicio y Secretario de Zona dos años (participando en salidas con el clan del grupo 31 en ocasiones).
Participé en varios cursos de formación y el avanzado I.M. de Movera en Zaragoza. De ese curso salieron muchos de los más conocidos personajes scouts de hoy, entre ellos Gajo, ex-JSN de ASDE.
Estuve un año como AJT en el grupo 368 Rabindranath Tagore (ANEDE/ASDE) y luego otro año en barbecho, centrado en encontrar trabajo. 
En 1984 conocí un grupo de padres que hacía un año crearon un grupo scout en el colegio Sant Francesc Xavier, de Horta, y excepto el JG que había sido scout, era un diamante en bruto con 120 chavales. Fue el proyecto de mi vida, y logramos ser uno de los diez mejores de toda Cataluña (palabras del Director General de Juventud), entre todas las asociaciones. El grupo estaba afiliado a Escoltes Catalans (ACDE) y seguimos por ese camino varias rondas. Cada dos años organizaba un campamento internacional, que nos llevó a Gilwell Park, Kandersteg, Wiltz y un intercambio bilateral a dos años con el grupo de scouts Junák de Jeseník, en la República Checa. 

Ser JT fue la mejor experiencia del mundo, nunca tuve menos de 5 patrullas, y la patrulla de guías funcionaba perfectamente sola. Nunca quise ser JG, y si lo fui, fue por imperativo legal, a mi me gustaba más estar siempre con los chavales. El grupo se planteó unirse a la Germanor Escolta de Catalunya (GEC) o ASDE-Scouts de Catalunya, y nos decidimos por ASDE para garantizar el futuro del grupo dentro de una institución con un Escultismo, en principio, formal. Luego vinieron tiempos de casorios y divorcios, y me distancié un tiempo, para regresar a ayudar al grupo como padre de lobata.
Con el politiqueo de pasillos y fusión manipulada de GEC con ASDE, al vernos algunos scouts añejos y cuatro grupos sin respaldo de ASDE Federal que apostó por cantidad, que no calidad y sobre todo FIDELIDAD, nos vimos forzados a abandonar la nueva asociación creada Acció Escolta de Catalunya y buscar un paraguas en la World Federation of Independent Scouts (WFIS) como Associació Catalana de Scouts, y seguimos teniendo buena amistad y hermandad con scouts de ASDE, pues no olvidamos nuestras raíces. Canalicé las conversaciones con Klaus Tegeder, su presidente, tuvimos estatutos, POR,  uniformes y todas las insignias en 1 año, y al segundo año ya éramos miembros de derecho. También fui enlace con la Asociación de Scouts Independientes de Madrid (ASIM) que se unieron a WFIS posteriormente. Soy autor de un manual de progreso scout, con especialidades, y un anexo para suplementar ese progreso al escultismo aéreo.
En el plano internacional, al caer el muro de Berlín, estuve muy activo buscando sponsors para ayudar al Escultismo emergente en los países de Europa Oriental, especialmente los tres países del Báltico, Albania, Rusia y Ucrania. Recibí dos recompensas de la Federación ORUR rusa (en el exilio), la Cruz al mérito de Besa Scout Albania (un proyecto de uniformar sus scouts con ayuda de Paloma de Proescout y otros clubs de coleccionistas scouts), la Insignia de Agradecimiento de Estonia, el Gylfaginning Award de los scouts de confesión asatruar-odinista, el Castor de Plata de los Scouts Bielorrusos (en el exilio), así como varios certificados de agradecimiento.

Castor de Plata de los Scouts Bielorrusos (en el exilio), en el centro y su certificado
Medalla del Centenario de la Independencia en el exilio (derecha) e Insignias de Promesa (izquierda)
Imagen: Colección de Jerry Da Silva


SUS INICIOS COMO COLECCIONISTA SCOUT
Comencé con 14 años, cuando mi prima, que vivía en Caracas, tenía un amigo scout que quería insignias españolas. A mí me molaba eso de escribir, esperar, recibir cartas gorditas, y volver a escribir. Luego encontré un listado de direcciones de asociaciones scouts, y les escribí a todas, unas 70, enviando una insignia en cada una (mis padres en eso fueron generosos). Me contestaron menos de la mitad, pero fue un buen comienzo. En mi primer viaje a Gilwell Park, conocí a mi mentor Bill Starace (d.e.p.) que me introdujo en el Badgers Club. Y así hasta hoy. Soy co-fundador del Club Tejones de España que ya casi está camino de cumplir 40 años de historia.


LO QUE MAS TE GUSTA DEL COLECCIONISMO SCOUT
La hermandad que se cimienta a lo largo de los años, pero eso es algo que hemos perdido con la globalización y redes sociales. Los amigos que conservo son de mis primeros años, ahora debe ser todo rápido, deprisa y si en lugar de cambiar, se puede comprar, mejor; luego si te he visto no me acuerdo.
Fui también co-fundador de The Scout Badge Challenge (el reto de la insignia scout) que buscaba aportaciones de scouts para ayudar a los países que no tenían recursos para lucir insignias bonitas y hasta entonces se limitaban a feas serigrafías o bordados manuales (en el mejor de los casos). Logramos ayudar a un montón de asociaciones durante la década de los 90 y conseguimos muchos fondos para eso. Pero como pasa siempre, aparecieron los tiburones de turno, los chinos fantasía, los crápulas, y nuestro trabajo pasó a ser de alabado a vilipendiado y despreciado por su culpa. Se regalaban miles de insignias a los scouts que lo necesitaban, pero otros miles inundaron el mercado, y encima se hacían variedades para exprimir a otros coleccionistas, o la más alta distinción que se repartían como caramelos (que la asociación no había autorizado por cierto), o insignias para contingentes que no participaban en Jamborees. Nuestra última colaboración fue para el Contingente español al Jamboree de Chile y frente al descrédito, decidimos abandonar.


¿CUALES SON TUS INTERESES COLECCIONISTAS?
Soy scout coleccionista, primero porque gracias a ser scout, conocí este mundo del coleccionismo. Además fue mi primera especialidad en la tropa, gracias a una colección de monedas que todavía conservo. Desgraciadamente, cuando empezó la crisis hace dos décadas, tuve que malvender gran parte de mi colección, una de las mejores de Europa en progreso de tropa scout, y limité mis preferencias a Scouts aéreos, Exiliados y Boy Scouts de América (especializado en progreso scout e insignias de posición/rango).


LA PIEZA MAS ESPECIAL DE TU COLECCION
Especialmente interesantes y valiosas para mí son las insignias para el equipo nacional de los Boy Scouts de América, en algunos casos se han confeccionado 4 para cada responsable y el resto suele ser costumbre destruirlas para evitar la especulación, pero aquí el mercado es un caramelo frente a los que todo quisqui sucumbe, y suelen aparecer por los mercados de subastas a precios estratosféricos. Una de esas insignias es NATIONAL HONORARY PRESIDENT que se obsequia a cada presidente de los Estados Unidos y que tengo el honor de tener una en mi colección. A excepción de Gerald Ford que fue scout y usó uniforme con esa insignia, ningún otro la ha usado. Tengo contacto con un coleccionista que tiene la que estuvo en manos de Ronald Reagan.
También tengo aprecio a los prototipos, pues los BSA se pueden permitir el lujo de hacer prototipos antes de lanzar insignias al mercado. Son variantes que no siempre se valoran, y a veces confunden. De este tipo hay muchas, tanto de council shoulder patches (las identificativas del territorio), como progreso o recompensas. No es que sea mi pasión, pero si me llegan, bienvenidas son. 

NATIONAL HONORARY PRESIDENT
Imagen: Colección de Jerry Da Silva

TU INSIGNIA MAS BUSCADA, TU “SANTO GRIAL”
No tengo una insignia que se considere el Santo Grial, pero si tengo que elegir una, la de Promesa de los Scouts Bielorrusos en el exilio podría serlo. (Nota del blog: Jerry recibió recientemente con posterioridad a la entrevista, cinco ejemplares, ver la segunda fotografía). 
Los bielorrusos estuvieron muy activos en los campos de refugiados entre 1945 y 1951, pero no sobrevivieron en la diáspora, a diferencia de rusos, ucranianos, países bálticos, polacos, checos, eslovacos y húngaros. 
Es curioso que aquellos países que se cargaron el Escultismo antes de la II Guerra Mundial como Bulgaria, Yugoslavia o Rumanía, no tuvieron la oportunidad de tener grupos en el exilio, y eso que desde su disolución/transformación no pasaron más de 10 años hasta estallar el conflicto. Eso demuestra que aunque tengas un potencial enorme, crezcas y te consolides, todo eso se puede derrumbar en pocos años. Y lo hemos visto en nuestra propia casa, en otras circunstancias y con otras motivaciones.

No hay una insignia en particular que me quite el sueño. Quizá la antigua Promesa de Metal de la OBMP de Bulgaria, que es rarísima y no la tengo. Pero bueno, cada vez que recibo algo, es una alegría, cada vez que descubro una pista y vas tirando del hilo hasta encontrar la persona o el portal adecuado donde se puede conseguir, otra gozada. La lástima es que el dinero haga mella en todo esto, y haya gente que llegue a pagar USD.$71,000 por la insignia del Subcampo Maitrise del Jamboree Mundial de 1947. No sé, puedo entender que alguien pague $300 o incluso $1000 por una rareza (si se lo gastan en un iPhone, ¿por qué no?), aunque sea un dolor para el bolsillo, pero si te sirve para completar tu colección, allá cada uno con su billetera. Pero los importes astronómicos me sorprenden. Están a un nivel que no llego a entender, pues la mayoría trabajamos para vivir y no nos sobra el dinero, que no debería servir para estas cosas. Es mi opinión.

Bulgarian Scout Badge 1923
Imagen:Archivo de Jerry Da Silva


OTROS TESOROS DE TU COLECCIÓN
Recientemente tuve a grata sorpresa de obtener insignias de los búlgaros en la diáspora, herederos dicen de la antigua OBMP y sin vínculos con la madre patria; solo queda un grupo en Chicago (hubo otro en Toronto) y conservan la histórica flor de lis y el león rampante. 

OMBP - Bulgaria
Imagen: Colección de Jerry Da Silva

También de los bielorrusos que nacieron como exiliados tras apoderarse los nostálgicos de la URSS del país, así que son los únicos que de verdad se pueden considerar como tales hoy día, solo hay un centenar entre EEUU, Canadá y Australia, pero es una muestra de la fuerza que el escultismo tiene para fortalecer el amor por la identidad nacional.

Insignias de Scouts Bielorrusos (en el exilio)
Imagen: Colección de Jerry Da Silva

Antigua insignia de promesa Scouts Bielorrusos (en el exilio)
Imagen: Archivo de Jerry Da Silva


¿ALGUNA OTRA COSA QUE QUISIERAS COMENTARNOS?
El coleccionismo scout me ayudó también a ser un apasionado de la Historia. Ese “por qué” en la evolución de algunas insignias, por ejemplo, los scouts húngaros con su corona de San Esteban y como desapareció ese símbolo o los ángeles que la flanqueaban, por el escudo de armas de la república en un esfuerzo de no sucumbir a las presiones comunistas antes de su disolución forzada. 
Precisamente, gracias a eso, me forcé a sacarme la carrera en la NYCU (Nueva York). La verdad es que quería Historia, pero no habían plazas para cursarla online, y me conformé con Geografía que también tocaba algo de Geografía histórica y humana. Lo hice por amor propio, no por necesidad, y me tiré siete años, tenía que ir por lo menos una o dos veces por año, pero pese a todo me salió más barato que sacarlo en España. La lástima es que para convalidar me piden tres años aquí, y como eso no me da de comer y sinceramente me la sopla porque no voy a ejercer, pues eso, con dos piedras.

Muchas gracias Jerry por brindarnos la oportunidad de conocer muchos aspectos de tu vida scout y coleccionista, y que muchos de nosotros desconocíamos.